Quizá no muchos lo sepan, pero el gobernador del estado de New Jersey, en Estados Unidos, no quiere que Tesla venda sus vehículos dentro de su territorio estatal. Una de las razones parece ser la gran influencia de las compañías petroleras y fabricantes de combustibles fósiles que operan en la región, a las cuales obviamente no les conviene para nada la presencia de Tesla, una fabricante de vehículos eléctricos que nada tiene que ver con lo que ellos producen.
Jay Inslee, el gobernador del estado de Washington, opina todo lo contrario que su par de New Jersey: está a favor de la venta de autos por parte de Tesla dentro de su estado y recientemente ha autorizado a la compañía a vender sus autos eléctricos en sus propias tiendas. Esto permitirá que Tesla pueda llegar a una mayor cantidad de clientes, lo cual por supuesto es una buena noticia para la ecología.
La compañía ha declarado que la legislación de Washington debería ser un ejemplo a seguir para los otros estados de la nación, algo en lo que estamos totalmente de acuerdo, pero también debería aprobarse en el resto de los países del globo.
Cuanto mayor sea el uso de automóviles eléctricos a nivel mundial, más verde será el futuro que nos espera a nosotros y a las generaciones venideras.