La tecnología avanza a un nivel casi inimaginable en todo el mundo. Día tras día, son fabricados e ideados nuevos aparatos con el propósito de facilitarnos una tarea en particular o varias tareas a nosotros los seres humanos. No solo hacen nuestra vida social, trabajo y tareas más fáciles, sino también nos entretiene y nos ayuda en varios aspectos.
Pero claro, tal producción masiva de los nuevos adelantos y tecnologías tienen un precio, y no solo nos referimos a un capital, sino también los recursos que son extraídos de nuestro planeta, los cuáles muchos de ellos escasean y su falta puede causar un desequilibrio, no solo para el ecosistema, sino también para nosotros mismos. Además, algunos tipos de producción son contaminantes, lo que perjudica aún más al medio ambiente.
Siemens, es una compañía muy reconocida mundialmente, uno de los actuales líderes en tecnología y en producción de la misma.
Siemens se encarga de varias producciones tecnológicas, entre ellas, la de generadores eólicos, sistemas de automatización de edificios y sistemas de transmisión energética, entre otros. También, muchos otros de sus productos son amigables con el medio ambiente no contaminadolo. Su tecnología ha sido y es útil para las personas, pues muchas de ellas nos ayudan a usar el medio ambiente de una forma limpia.
El mayor problema de esta empresa es su producción, la cuál no es tan amigable con el planeta, pues genera unas 2.2 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono por año. Por esa razón, el próximo objetivo de la empresa multinacional es lograr reducir las emisiónes de CO2 a un 0% para el año 2030. Pero hay que ir paso a paso. La empresa ya está realizando trabajos para poder reducir hasta un 50% las emisiónes con fecha para el año 2020.
Todo este emprendimiento, exige un gran trabajo y organización de parte de la empresa, y ellos están dispuesto a seguir ayudando a el medio ambiente «empezando por adentro». Esto demandó una inversión de unos 100 millones de euros para poder ir realizando el plan paso a paso, pero Siemens calcula que a largo plazo, gracias a esta inversión se estará ahorrando anualmente unos 20 millones de euros en lo que a costes de energía se refiere.
Gracias a la tecnología de Siemens, se han podido reducir significativamente las emisiónes de CO2 en todo el mundo, y la compañía está dispuesta a reducirlas aún más al eliminar completamente las emisiónes propias, de forma que podemos esperar bastante trabajo de su parte, lo que se traducirá en un futuro a algo muy beneficioso para todos.