En cierta forma, las baterías recargables ayudan a fomentar la ecología, ya que pueden ser recargadas una vez su carga se agota, de forma tal que no es necesario desecharlas y comprar nuevas. Cualquier avance en esta tecnología es sumamente importante, y el día de hoy les traemos una noticia relacionada con el tema.
Un grupo de investigadores y científicos del Pacific Northwest National Laboratory (PNNL) han implementado una técnica para ver cómo es el flujo de la electricidad en las baterías, detectándose de esta forma qué es lo que impide el correcto flujo de electrones, lo cual hace que la batería se gaste más rápidamente. Las técnicas que están usando no son nuevas, pero anteriormente no habían sido aplicadas en esta área.
Con este descubrimiento se cree que se pueden desarrollar nuevas clases de baterías recargables que tengan una duración mucho mayor, lo cual es una noticia excelente por supuesto. Utilizar baterías recargables es importante si queremos un mundo que comience a hacer más uso de energías alternativas y renovables en lugar de continuar con el uso de los combustibles fósiles, los cuales dañan en gran medida al planeta Tierra.
No sabemos cuándo podrían ser desarrolladas las nuevas baterías, pero esperamos que no demoren mucho.