Hace varios años la energía solar todavía era considerada cara y hace varias décadas su precio estaba por las nubes. Gracias al avance de la tecnología se han podido abaratar los costos, lo cual es estupendo para la ecología, y ahora mucha gente cuenta con sus propios paneles solares en casa y prácticamente se olvidan de la factura de la energía eléctrica.
Hoy en día, en algunos lugares la energía solar se ha vuelto muy barata, o mejor dicho, los paneles se han vuelto baratos, ya que la energía solar en sí no tiene precio (es como si el aire lo tuviera). En el estado de Texas, en Estados Unidos, se puede conseguir energía eléctrica generada en centrales solares a muy buen precio. Se estima que el costo es incluso más barato que si se compra energía generada a partir del gas natural, del carbón o en una central nuclear.
La firma Austin Energy recibe energía eléctrica de origen solar y paga un total de 5 centavos de dólar por KWh de energía. Para poner las cosas en perspectiva, la compañía ha calculado que para recibir cantidades similares de energía generada por gas natural tendría que pagar 7 centavos por KWh, 10 centavos por KWh en el caso de recurrir al carbón y 13 centavos por KWh si optara por electricidad generada en una central nuclear.
El uso de la energía solar está creciendo lentamente, y cada vez un mayor número de personas se dan cuenta de que es barata y más verde que la mayoría de las otras fuentes.