Esto es algo que le vendrá muy bien a la ecología y que se podría convertir en un gran cambio dentro de la industria de la energía solar y de los paneles solares. Recientemente, una casa ubicada en Sídney, Australia, ha instalado un sistema de energía solar fuera de lo común: el mismo no solamente se encarga de recibir los rayos del sol para generar electricidad, sino que además es capaz de generar calor. La instalación se encuentra montada en el techo por supuesto y cuenta con paneles fotovoltaicos muy delgados que integran un sistema de conductos de energía solar térmica, que se puede utilizar para dar calor a la casa cuando hace frío.
La capa superior de la instalación recoge energía solar, como sucede con los paneles solares corrientes, mientras que el calor que se queda atrapado entre las capas es enviado hacia la casa para calentar el ambiente. Este nuevo tipo de sistema ha sido desarrollado en conjunto por la firma Bluescope y por la Australian Renewable Energy Agency (ARENA). Se trata de una nueva tecnología que hará que las instalaciones solares sean mucho más provechosas, principalmente en invierno, y sin lugar a dudas vendrá muy bien en ciudades de clima frío.
Esta creación permite hacer un doble ahorro de energía eléctrica de la red general: por un lado se contará con la electricidad generada gracias a los paneles y además no será necesario usar calefacción eléctrica.
Esperemos que más proyectos de este estilo puedan surgir y que una mayor cantidad de hogares comiencen a implementar esta clase de instalaciones solares, que sin lugar a dudas reportan más beneficios que las tradicionales.
Cuéntanos: ¿qué opinas sobre esta nueva clase de instalación solar? ¿Te gustaría poder contar con una similar en tu hogar?