No es noticia nueva que la variación de los cambios climáticos provocados por las acciones humanas ha llegado a afectar cada vez más a la Tierra, pero no por ello deja de ser noticia y menos una importante. La situación actual en la Antártida esta siendo cada vez más delicada, donde las barreras de hielo que conforman la superficie congelada se vuelven mas estrechas o llegan casi al punto de desaparecer, en la actualidad los satélites de la ESA, como el histórico Envisat, han obtenido datos acerca de la velocidad del hielo y se ha presenciado que la existencia de un punto critico donde estas barreras sirven como diques de seguridad, reteniendo así enormes cuerpos de hielo que se dirigen al mar, podría provocar desplazamientos de dichos cuerpo a mar abierto, haciendo que estos puedan afectar el nivel del mar.
La situación de la pérdida de área en las barreras de hielo de la Antártida, donde es gracias al satélite de la ESA que se ha podido ver que en estos 20 años ha habido desapariciones de enormes proporciones de hielo en el dique. Comparando que tan grandes son las proporciones de hielo perdidas en este tiempo, esta por ejemplo la barrera de hielo Larsen, que se derrumbo en 1995, perdiendo así una superficie proporcional al territorio de Berlín, siete años después se vendría desfragmentando la barrera de Larsen B, y el de la barrera Wilkins que empezó a desintegrarse en 2008.
Los científicos del Instituto de Geografía de la Universidad de Erlangen-Núremberg y del Laboratoire de Glaciologie et Géophysique de l’Environnement de Grenoble, Francia, utilizaron datos de radar obtenidos por satélites como ERS y Envisat de la ESA, estos datos dieron a conocer el verdadero estado en el que se encontraban las barreras de hielo del muro de contención, que al ser cada vez mas estrechas causaría su alejamiento del interior y a su vez los glaciares ubicados tras ese dique acelerarían su paso y podría provocar una perdida del hielo interno del dique, causando así estragos como afectando el nivel del agua en el mundo.
Esto tiene muy preocupado a los científicos encargados de la investigación y deja un inquieto sentimiento de lo que se puede deparar en un futuro. Por lo que dichos científicos se han visto en la necesidad de calcular el área ocupada por cada plataforma de hielo que constituye actualmente el territorio, y que en caso de que alguno de estos se viera reducido considerablemente; cual no tenga un efecto inmediato sobre la plataforma y cual si podría significar un riesgo para el resto de la estructura en conjunto.
Se conoce que aproximadamente a un 13% de la zona del hielo es ocupado por barreras de hielo contienen un elemento llamado “Barrera de hielo pasiva”, que es parte de el cuerpo que no produce algún tipo de contención adicional.
El Dr. Johannes Fürst, del Instituto de Geografía de la Universidad de Erlangen-Núremberg explicaba que «Desde hace varias décadas la teledetección por satélite ha permitido llevar un registro de los cambios y el movimiento de los frentes de hielo de la Antártida. En algunas regiones, hemos asistido a continuas recesiones de las barreras de hielo».
El Dr. Fürst añade «Una vez que la pérdida de hielo a través del desprendimiento de icebergs supera la barrera de hielo pasiva y afecta a la banda de seguridad, su flujo hacia el océano se acelerará, lo que podría desencadenar una elevada contribución al aumento del nivel del mar durante décadas y siglos».
Sin embargo, también afirman que hay algunos casos diferentes en el continente donde no todas las barreras cuentan con esa parte pasiva.
Con este descubrimiento se dice que ayudará a predecir con mayor exactitud el futuro acerca del hielo procedente de la Antártida; como el destino de la Indladsis que se ve modificada por la exposición del calentamiento global y se encuentra vinculada a los cambios provocados en las barreras de hielo flotante.
Dejanos tu comentario sobre este muy interesante tema.