Un nuevo reporte indica que en aproximadamente 30 años podría haber una crisis de agua a nivel mundial, si es que no cambiamos nuestros hábitos actuales y el uso que le damos para generar energía eléctrica. A medida que la población aumenta, también crece el consumo de agua y de energía. Ahora mismo, en Estados Unidos el 41% de la energía eléctrica se produce en las represas, las cuales utilizan agua corriente. No solo esta nación, sino todo el mundo debe comenzar a utilizarla más adecuadamente. En 2030 será necesario hacer un uso mucho mayor de la energía solar y de la energía eólica, o de lo contrario la situación podría volverse muy complicada. Una crisis de agua sería una de las peores que podría afectar a la humanidad en el futuro.
La CNA Corporation indica que durante el siglo pasado la necesidad de agua ha aumentado 6 veces y la población unas 3 veces aproximadamente. Si continuamos a este ritmo, se estima que el 40% de la demanda mundial no se podrá satisfacer en pocas décadas. Si bien mucha agua usada en la producción de energía en las represas vuelve a los ríos, una parte se pierde en el proceso y otra buena parte puede resultar contaminada o no apropiada para el consumo humano. Si a esto le sumamos un incremento en la demanda por parte de la población, queda claro que el agua se convertirá en un recurso que no estará tan disponible como sucede hoy en día en los países desarrollados.
El estudio no fue realizado a nivel mundial, sino en el estado de Texas, debido a su incremento en la población y su utilización de recursos, así como también por sus sistemas de generación de electricidad, así que tampoco hay que fiarse de esta investigación al 100%.