El magnífico bosque Ka es el único de su tipo que queda en el mundo. Pero no se trata solamente de una rara área biológica: también es un lugar muy importantes para muchas personas. El bosque provee a las comunidades de la región con ciertas cosas, como por ejemplo plantas y hierbas medicinales. Los troncos caídos suelen ser utilizados en canoas, mientras que algunas nueces que crecen por allí son las preferidas de los niños.
En marzo de 2014, luego de 10 años de esfuerzos, finalmente se aprobó una ley de protección para 30 de las hectáreas que ocupa el bosque. Este es el primer paso a favor del bosque que se ha dado en mucho tiempo, y se espera que se pueda llegar a conseguir protección para 160 hectáreas, que es el territorio total ocupado. En este bosque se pueden encontrar toda clase de plantas exóticas y también algunos ejemplares de la Dúcula de Micronesia, que está próxima a perder su hábitat natural.
Los propietarios de las tierras han recibido dinero a cambio de no usarlas en su favor, para así tratar de mantener al bosque Ka y sus cercanías en el estado más natural posible.
Este es uno de los pocos casos de protección de un área que se declaran cada cierto tiempo, y esperamos que la ley pronto pueda ponerse a favor del bosque entero.