Cosas así no se escuchan o leen todos los días, ser el primero en algo siempre representa ser un foco de atención para todos a tu alrededor, y esto es sin duda algo impresionante. Mucho se sabe de la criogenización y las razones por las que normalmente se aplica en las novelas, películas en diversas historias del género ficticio, pero es poco o nada lo que se ha sabido de un caso verídico de criogenia en la vida real, y aún más, que haya sido una niña apenas en su adolescencia la que haya pedido voluntariamente este favor, como su último deseo antes de que su vida llegara a su fin.
De todas las razones vistas en las historias con temática ficticia, esta situación cubre la de la esperanza de un día en el futuro, esta chica de Reino Unido, pueda llegar al día en que una cura, ante un extraño, caso de cáncer pueda ser encontrado a lo largo de su descanso en criogenia. Su último deseo acarreó con un largo proceso legal, donde los primeros en oponerse a esta idea fueron los padres de la joven.
El por qué se llegaron a estos extremos, es debido a que tras haber recibido los diagnósticos, el año pasado, sobre su estado de salud, y tras un tiempo de tratamiento activo no se veía mejora, inclusive su organismo estaba sufriendo deterioro, para que luego en agosto caer en cuidados paliativos. Durante dicho tiempo se dio la tarea de investigar la posibilidad de ser congelada, todo por la vía legal.
Después de varias audiencias con la Suprema Corte de Justicia del Reino Unido, se le fue otorgado a la joven su deseo, dejando a la madre encargada de llevar acabo los detalles que acarreasen el deseo de su hija. Esto claramente no fue del todo agradable para los padres y aún debe dejarles un mal sabor de boca, ya que durante del tiempo en que se llevaron a cabo los trámites que respectan a la petición, estos tenían miedo por lo que pudiera pasar con su hija.
El juez de la Suprema Corte dio su veredicto basado en los hechos (y el mérito legal de estos) de que esta decisión haya sido tomada por la joven; expresado en una carta que esta dio al juez explicando la razón de su deseo, la carta dice:
«Se me ha pedido que explique por qué quiero hacer esta cosa inusual. Tengo sólo 14 años y no quiero morir, pero sé que va a pasar. Creo que ser cryo-conservada me da la oportunidad de ser curada y despertada, incluso en cientos de años. No quiero ser enterrada bajo tierra. Quiero vivir y vivir muchos años, por ello creo que en el futuro podrían encontrar una cura para mi cáncer y despertarme. Quiero tener esta oportunidad, este es mi deseo.»
Su padre, de las dos personas menos convencida por la petición de su hija, comenta el miedo que tiene del día en que su hija despierte, en un mundo (a lo mejor) completamente nuevo para ella, cambiado, donde ya no tendrá a su familia y sin nada de lo que ya tiene.
Los abuelos maternos que dedicaron sus esfuerzos para recolectar el dinero, para cumplir con el último deseo de su nieta, al verse incapaces de llegar a lo requerido, una institución sin fines de lucro, llamada Cryonics UK, se ofrecieron a pagar los gastos de transportación de la chica a las instalaciones de Estados Unidos donde será preservada.
La joven fue congelada en octubre, pero por motivos legales y en respeto de los familiares de la chica, el juez emitió una orden para que esta noticia no fuera dada a conocer, sino hasta pasados 30 días del “fallecimiento” de la joven; momento para el que debería ser puesta en criogenia.