Los residentes de la ciudad de Beijing están pasando por un mal momento. La capital de China es actualmente la ciudad con la mayor contaminación del aire de todo el mundo. Se ha comunicado que casi toda la ciudad está paralizada debido a los altos niveles de smog que se han registrado. Las principales rutas de transporte, tanto aéreas como terrestres, han sido cerradas para evitar cualquier tipo de desastre, mientras que se ha sugerido a las personas que permanezcan en sus casas para poder proteger sus pulmones, sus ojos y sus propias vidas por supuesto. El nivel de smog ya ha pasado del estado de «peligroso» para llegar a un punto que no se había alcanzado anteriormente y está por encima de todos los índices.
Esto último ya es una gran advertencia para que las autoridades de la ciudad y del país tomen cartas en el asunto y opten por implementar la ecología en todos los aspectos posibles. Los automóviles eléctricos, los transportes urbanos masivos y el uso y generación de energías renovables son varios de los elementos que podrían beneficiar en gran medida a la ciudad y a la población. Aparte de esto, plantar varios cientos de árboles tampoco sería una mala idea, dada la situación.