El Bosque seco
El bosque seco, también conocido como bosque xerófilo o selva seca, es un amplio ecosistema con una densa vegetación arbolada que alterna entre climas lluviosos y climas secos. También son conocidos como bosques secos tropicales y es uno de los catorce biomas en los que se clasifican las ecorregiones del planeta Tierra.
El bosque seco puede ser encontrado entre las selvas lluviosas y los desiertos. El Gran Chaco de Bolivia o la Selva Lacandona que se encuentra en el sur de México son dos ejemplos muy claro de esto. En otros países como Ecuador y Perú podemos encontrar el Bosque seco ecuatorial, mientras que en África vamos a encontrar el gran Bosque seco de Madagascar, entre otros.
Los bosque secos tiene un clima cálido durante casi todo el año y las temperaturas suelen rondar los 25 y 30 ºC. Las lluvia son un poco abundantes durante el invierno, pero durante el resto del año casi no se registran grandes precipitaciones.
En gran cantidad de estos bosques se encuentran árboles principalmente caducifolios, como son por ejemplo la teca y la uña de vaca, los cuales pierden sus hojas durante las estaciones de sequía y las recuperan tiempo después. Dado que las plantas pierden humedad por las hojas, el perder las hojas le permite al árbol conservar humedad durante los períodos de sequías. En las zonas más húmedas del bosque se suelen encontrar árboles perennifolios.
El bosque seco es además uno de los ecosistemas maderables de mayor valor, ya que la mayoría de sus especies de árboles suelen tener un mayor valor comercial que aquellas bosques y selvas localizados en zonas muy ecuatoriales.
La fauna del bosque seco se compone de monos, felinos, roedores, ciervos y algunas aves.