Desde la antigüedad el contemplar las estrellas, todo el cielo nocturno en general, a sido una actividad de que puede efectuar cualquiera que tenga la oportunidad de mirar al cielo sin ningún inconveniente y contemplar a este en su completo esplendor. En la actualidad, este desfile de estrellas se ve obstruido por lo que llamamos contaminación lumínica. La contaminación lumínica es producto de la constante emisión nocturna de luces artificiales con intensidades, direcciones, rangos espectrales u horarios innecesarios, esto a dejado a las grandes ciudades que cuentan con un consumo energético gigantesco, que cuentan con grandes cantidades de luz disparadas a lo largo y ancho del cielo.
Una declaración dada por la cadena de radio Española, “Radio Voz” y transmitida a la comunidad de Galicia, cuenta durante una de las emisiones de su programa educacional “Ecovoz”, Paullino Gasalla, coordinador de la sección de astronomía de la Sociedade Galega de la Historia Natural, hizo mención a este tipo de contaminación, que además de ser un tema de conversación un tanto desconocido dentro de los temas de conciencia social, y de esta forma la población no se dan cuenta que este puede venir provocando algún tipo de alteración.
Esto además de afectar las actividades astronómicas que son obligadas a llevarse acabo a las afuera de la ciudades y poblados donde las luces evitan que el cielo se vea en toda su plenitud. Pero a parte de solo no poder contar con la posibilidad de visualizarse el cielo si no fuera por esa cortina espectral de contaminación, el medio natural se ve como principal afectado, ya que que la fauna que habita en la oscuridad de la noche se ve afectada provocando una alteración en su forma de vida.
Es bueno dejar en claro que acabar con este tipo de contaminación puede volverse una tarea difícil, pero no por ello se deja de intentar el buscar soluciones que apoyen la rutina nocturna de las ciudades sin dejar a estas queden en penumbra o la oscuridad total. Los avances hechos a razón de responder esta situación proponen la colocación de lámparas que proyectan la luz sobre el suelo, ahorrando energía, con la condición que estas no deben enfocar su luz hacia arriba; otras veces se recomienda que no se pongan luminarias de sodio de alta expansión ni de neón, sino de baja expansión.
Por lo que la solución a este inconveniente puede venir siendo satisfactorio y provechoso para las grandes ciudades y poblados que al contar con un maravilloso cielo estrellado, es que se pueden unir a los destinos “Starlight”, ya que el cielo es un lugar para el disfrute del publico y generaciones futuras. Este cielo que vemos es solo una porción visible de la inmensidad de un universo y no deberíamos dejarnos perder de este maravilloso espectáculo.
Apoyemos por una causa y que esa causa nos beneficie, ya que al haber menos contaminación lumínica significara también menos consumo energético, por lo que ayudando al planeta también nos ayudamos a nosotros mismos, para tener un futuro con un brillo mas natural.
Si te gustan las estrellas, déjanos tu comentario.
Un mal diseño enfocado a la luz indirecta, causa este fenómeno tan indeseable. Se deberia cuidar más este aspecto.
Los beneficios son claros: Tener una visión de la cúpula estelar, reducción del cosumo de energía y el respeto al equilibrio ecológico de la fauna nocturna.