En nuestra publicación anterior les habíamos dado algunas sugerencias o consejos para tomar el transporte público, y a continuación les daremos algunas más. Las ventajas de los trenes y los autobuses frente al automóvil sin dudas son varias, y más aún si viajamos solos. Comenzar a usar el transporte público a diario también es una forma de ayudar a la ecología.
6) Taxi: a menudo no lo tenemos en cuenta, pero el taxi también es una forma de transporte público, aunque no está destinada para muchos pasajeros a la vez por supuesto. Existen algunos taxis eléctricos que pueden salvarte en alguna emergencia, así que procura hacerte con el número de alguna agencia de taxis si no tienes uno ya.
7) Telecomunicación: ¿realmente necesitas hacer cierto trabajo desde la oficina o es necesario que vayas a aquella reunión en otra ciudad? Si es así, el transporte público es tu aliado, pero si no, puede que ni siquiera necesites salir de casa y baste con realizar una transmisión vía Internet o trabajar desde el hogar.
8) Busca promociones: quienes viajan con mucha frecuencia en autobuses o trenes a menudo compran boletos en mayores cantidades, ya que pueden conseguirlos más baratos de esta forma. Esto hará que uses el transporte público más seguido y que ahorres un poco de dinero extra.
9) Planea tus viajes: revisa de vez en cuando las rutas de viaje de los distintos servicios. Pueden que para llegar a tal punto sea más conveniente tomar el autobús en lugar del metro por ejemplo, o tal vez puedas bajarte en alguna estación y caminar unas pocas cuadras hasta llegar a tu destino.
10) ¿Y si no me gusta el transporte público?: si por alguna razón no te gusta el sistema de transporte público de la ciudad donde vives, entonces puedes quejarte, recuerda que no en vano pagas impuestos. Siempre dirige las quejas a donde corresponde y hazlo de buena forma, buscando la mejora de los servicios en beneficio de la mayoría.